Esta vez no pudo ser..., pero no será porque no le pusísteis ganas.
Ya llevais unos cuantos partidos echándole garra al juego, y eso se nota. Este sábado os pusísteis por delante en el marcador, pero como dice el dicho, no hay peor astilla que la de tu propio palo (o algo así) y, a pesar del buen partido que hicísteis, el Montecarlo le dio la vuelta al marcador. Una pena, porque os merecíais la victoria, pero podeis estar satisfechos; desde fuera vimos un equipo metido en el partido, buscando contínuamente el gol y guardando las espaldas pero, a pesar de acabar el partido encerrando a los locales en su área, el ansiado gol no llegó.
Esta visto que la lección de la presión y las ganas la teneis ya aprendida, no la olvideis, ahora sólo queda quizá serenar el juego cuando la pelota ya es vuestra. Si lo conseguís, será difícil parar a estos tigres...
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